Ya
hace más de dos meses que zarpamos, con no pocos vaivenes en nuestro discurrir
por este ancho mar de las Metodologías Interactivas…
Armándonos
de valor y con la intrepidez de este grumetillo, como hicieran nuestros
antecesores, con los más modernos astrolabios, cuadrantes, sextantes,
almanaques náuticos y sofisticados instrumentos varios de navegación, nos
disponemos a emprender travesía buscando preciado puerto, el de nuestra primera
gran empresa (o mini-proyecto), siendo nuestra intención trazar el portulano
más valioso al que nos podríamos enfrentar (el plano de nuestro colegio).
Con
este sencillo Proyecto, pretendemos poner en práctica y aplicar todos los
contenidos que hemos visto, hasta ahora, en varios temas y en varias áreas o
asignaturas en la ESO, de manera ínter e intradisciplinariamente:
- Del área de Geografía
e Historia:
La Tierra y su
representación.
Lectura e interpretación
de imágenes y mapas de diferentes escalas.
- Del área de Tecnología:
El dibujo técnico. Fundamentos e instrumentos.
- Del área de Matemáticas:
Unidades del sistema
métrico decimal. Comparación, equivalencia y ordenación de medidas de una misma
magnitud.
Factores de
conversión.
Utilización de medios
tecnológicos en el proceso de aprendizaje para: b) la elaboración y creación de
representaciones gráficas de datos numéricos, funcionales o estadísticos
(gráficas de funciones, diagramas de sectores, barras,…).
Uso de herramientas
informáticas para estudiar formas, configuraciones y relaciones geométricas.
Valoración del lenguaje
algebraico para plantear y resolver problemas de la vida cotidiana.
- Del área de Educación
Plástica, Visual y Audiovisual:
Todo el Bloque 3. Dibujo técnico.
El
Proyecto finalizará con la realización, por parte de los alumnos/as, de dos
planos hechos a escala y con todo lujo de detalles, tanto de la planta baja del
Centro (incluidos todos los anexos, como: pistas polideportivas, porche, depósito
de gasoil, arenero, parque de Infantil, etc.), como de la planta superior y
todas sus aulas y dependencias.
Aunque
ya sabemos que lo realmente importante de este viaje no será que el plano quede
milimétricamente perfecto, sino el ir descubriendo a cada paso esos ducados de
plata y doblones de oro que vayamos añadiendo a nuestro cofre del tesoro del
aprendizaje que, sin duda, rebosará allá a finales de Junio, cuando avistemos
la tierra del merecido descanso del viajero, para recobrar el aliento y
emprender nuevos retos y aventuras por el océano del conocimiento.
Aunque,
vayamos poco a poco, puerto a puerto, tesoro a tesoro…