Para entender mejor nuestra
experiencia de aula sin libros pasaremos
a desarrollar cómo, cuándo y
porqué se han eliminado los libros de texto de las aulas del centro, cómo hemos
pasado del trabajo globalizado e interdisciplinar al trabajo por proyectos
actual.
Partimos de la idea de que la
vida nos presenta continuamente problemas que los tenemos que solucionar
con conocimientos de diferentes áreas a la vez pero en la escuela
nos empeñamos en presentar los contenidos fragmentados o separados por áreas.
Hace ya casi una década una tutora
de nuestro centro solicitaba ayuda a sus
compañeros en las reuniones de ciclo
cuando sus alumnos tenían dificultades
con algún contenido, les pedía ayuda para incluir esos contenidos en su
programación y abordarlos desde diferentes ámbitos. Algunos de los compañeros
acogieron esta iniciativa de buen grado pero otros lo vieron como una
intromisión. Este fue el germen, el inicio y podemos decir que en la actualidad
la visión global de los contenidos, interdisciplinaridad y coordinación es
nuestro día a día, nadie lo ve como algo extraño.
Hace ya 5 cursos comenzamos a
eliminar los libros de texto en las aulas de los cursos superiores (6º de
primaria, 1º ESO y 2ºESO) y en cursos sucesivos se fueron eliminando hacia los
cursos inferiores.
En principio, parece raro porque suele hacerse comenzando por infantil
para finalizar en 6º de primaria pero tiene una explicación. Nuestro centro
participaba en el programa de red XXI y disponíamos de portátiles en 5º y 6º de primaria,
estos alumnos estaban acostumbrados a trabajar con los ordenadores, disponían
de un servidor en el que los maestros
introducían contenidos, unidades didácticas, juegos… y los alumnos accedían con
usuario y contraseña, como un aula virtual. Muchos de los temas se trabajaban
desde el servidor en detrimento de los libros. Al pasar a la ESO esa dinámica
se rompía y desde la dirección del centro se solicitó el préstamo de más ordenadores para seguir en la misma línea
en la ESO y nos lo concedieron.
Evidentemente, si muchos de los
contenidos se estudiaban desde el servidor no se terminaban los libros y los
padres comenzaron a quejarse pero los contenidos sí se trabajaban, por ello se
decidió eliminar los libros de textos en los cursos superiores. En un principio
se dejaron los cuadernillos para que los padres tuvieran una guía y se
utilizaban para poner deberes o para refuerzo de los contenidos. También tenían
el apoyo de la plataforma de
AULA PLANETA
con sus recursos como enciclopedias , sus libros virtuales…
y de
edmodo .
En el centro ya teníamos
experiencias con libros electrónicos o digitales. Hace aproximadamente 7 años,
los alumnos de 3º de primaria utilizaban el libro electrónico en el aula y el
de texto en casa para estudiar o hacer las tareas.
En un principio consideramos
necesario el apoyo de Aula Planeta porque no todos los maestros del claustro
éramos definitivos, si al llegar los nuevos interinos no tenían la formación
necesaria, por lo menos sí podrían agarrarse al libro virtual.
La experiencia con Aula Planeta
duró unos años pero la descartamos por dos razones: en primer lugar, la
matrícula del centro bajó mucho,
los
alumnos de ESO se fueron del centro, las aulas estaban organizadas por niveles,
los maestros de los niveles superiores apenas utilizaban la plataforma porque
tenían su propia forma de organizarse ( introducción los
ring de
aprendizaje, utilización del servidor escolar,
aprendizaje basado en la
experiencia y manipulación…)
Por otro lado, para los cursos
inferiores apenas tenían contenidos adaptados, Anaya nos ofreció su plataforma
con libros y contenidos virtuales para 3º y 4º pero cuando llegó el momento no
lo tenían desarrollado.
A lo largo del presente curso
también probamos otra experiencia
SNAPPET,
muy interesante pero no era compatible con nuestros proyectos.
En los cursos inferiores
comenzamos a realizar experiencias globalizadas, escogíamos un tema alrededor
del cual organizamos los contenidos de las diferentes áreas. Por ejemplo
EL DAKAR
Los alumnos tenían un cuaderno
con las tareas a realizar, las áreas que impartía el tutor no se diferenciaban
en el horario, las tareas podían ser de lenguaje, naturales o matemáticas y se
trabajaban durante todo el día hasta que se terminaba. Al principio pensamos
que los niños se cansarían pero resultó ser todo lo contrario, ellos mismos
decidieron que querían seguir hasta final de curso. Los maestros de música,
ciencias sociales, educación física e inglés se sumaron a la experiencia.
Otros maestros han solventado la
carencia de libros elaborando sus unidades didácticas con una estructura muy
definida: video explicativo del
contenido, teoría escrita, ejercicios para trabajar en el cuaderno, ejercicios
para trabajar con el ordenador o Tablet y trabajo manipulativo. Todo este
material se comparte a través del 365 y se completa.
Se ha demostrado que este tipo de
trabajo favorece las inclusión, los niños se sienten más capaces ya que es más
fácil sentirse parte del grupo si se realizan las mismas tareas.
En todo este proceso nos hemos
encontrado con las siguientes dificultades:
- La organización del centro. La matrícula ha
disminuido tanto que en la actualidad contamos con tres aulas, una para
infantil, otra para 1º,2º y 3º y la última con los alumnos de 4º,5º y 6º.
- El claustro cuenta cada vez con menos maestros,
no todos somos definitivos. Los que sí somos definitivos contamos con formación
que hemos realizado en el centro, en el CFIE o de forma online. Pero no todos
interinos que llegan han oído hablar de proyectos, rutinas… afortunadamente, la
mayoría se adapta y repiten un curso más pero hemos tenido algún caso en el que
ha tenido bastantes dificultades para adaptarse.
- Se requiere mayor esfuerzo para programar,
encajar los contenidos en los proyectos. Requiere mucho más tiempo de trabajo
fuera del aula y por lo general, los proyectos no se pueden reutilizar amenos que realices bastantes modificaciones.
- La coordinación entre profesores tiene que ser
máxima, utilizamos wassap, office 365 y reuniones semanales.
- En ocasiones los padres se sienten perdidos, no
saben qué contenidos están trabajando exactamente sus hijos pero lo hemos solventado con las celebraciones del aprendizaje. al finalizar los proyectos invitamos a las familias a venir al cole, realizamos una actividad final y los niños explican a los padres qué, cómo han aprendido a la vez que les enseñan su porfolio.
- Los niños se divierten, trabajan pero no son
conscientes de lo que están aprendiendo,
para ello se instauró la necesidad de cumplimentar un "dosier" llamado porfolio con los contenidos
del currículo que se trabajaba con cada
experiencia.
ventajas de trabajar sin libros e incluir las nuevas metodologías:
- La inclusión es más evidente ya que los alumnos con necesidades trabajan en grupo con sus compañeros aportando sus conocimientos a pesar de sus limitaciones.
- Más naturalidad a la hora de presentar los trabajos y exponerlos.
- Facilidad para defender ideas y opiniones.
- A pesar de la dificultad que tiene dar clase a diferentes niveles a la vez, al trabajar sin libros puedes unificar contenidos, sobre todo aquellos que son cíclicos. la explicación puede ser igual para todos y el nivel de exigencia variar dependiendo del curso.